Cantabria, esa joya del norte de España, no solo se caracteriza por sus verdes paisajes y rica gastronomía, sino también por sus costas salpicadas de faros. Estos guardianes del mar, con su historia y belleza única, son un atractivo turístico imprescindible para cualquier viajero. En este artículo, te llevaré en un viaje luminoso de «faro a faro», explorando los 9 faros de Cantabria que puedes visitar.
Cada faro tiene su propia historia, su propia arquitectura y su propio encanto, lo que los convierte en más que simples estructuras de navegación; son verdaderos monumentos que cuentan historias del pasado y del presente. Desde el histórico Faro del Cabo de Ajo, con sus impresionantes vistas al Cantábrico, hasta el encantador Faro de Cabo Mayor en Santander, que combina arte y naturaleza de una forma única, estos faros ofrecen una perspectiva diferente y emocionante de Cantabria.
Prepárate para descubrir estos magníficos faros que no solo iluminan el camino de los marineros, sino que también iluminarán tu experiencia turística en Cantabria. No importa si eres un apasionado de la historia, un amante de la naturaleza o simplemente alguien en busca de nuevas aventuras, estos 9 faros te ofrecerán una experiencia inolvidable y completamente gratuita. ¡Sigue leyendo para conocer cuáles son y cómo pueden hacer de tu viaje a Cantabria una experiencia única!
Desde los 736 escalones del Faro del caballo al colorido faro de Ajo, pintado por el artista Cántabro Okuda.
Faro de Ajo – Ajo
Quiero mostrarte algo especial: el faro de Ajo, un verdadero ícono en Cantabria y una joya de nuestra lista de faros. Aunque su historia comienza en 1907, no fue hasta 1930 que abrió sus puertas. Pero, ¿sabes? Lo que ves hoy es una versión más moderna, reconstruida en 1985. Y si eso no es suficiente, en 2020, Okuda San Miguel transformó este lugar con su arte, creando una de las obras más debatidas en Cantabria. Para muchos, este cambio alteró la esencia del faro original, pero para mí, es un acierto total. No solo soy un gran admirador de Okuda, sino que también reconozco el impacto turístico que ha tenido.
Pero espera, hay más. Alrededor del faro, se extiende una hermosa ruta costera. Imagínate pasear por ahí mientras el sol se pone, o simplemente disfrutar del sonido del mar. Es, sin duda, un lugar mágico que merece ser explorado.
Faro de Punta Silla – San Vicente de la Barquera
Al explorar los faros de Cantabria, un destino que no puede faltar es el más occidental de la provincia: el Faro de San Vicente de la Barquera. Esta joya arquitectónica, construida durante el reinado de Isabel II, es un testigo silencioso de la historia marítima española. Inaugurado en diciembre de 1871 como parte del «primer plan de alumbrado», este faro no solo ha sido un fiel guía para los navegantes, sino que también se ha transformado con el tiempo, adaptándose a las necesidades actuales sin perder su esencia.
Tras una reforma integral, el Faro de San Vicente de la Barquera ha encontrado una nueva vida. Lo que en tiempos pasados fue la residencia del farero, ahora se ha convertido en el centro de interpretación del Parque Natural de Oyambre. Este espacio, que conjuga historia y naturaleza, ofrece a los visitantes una experiencia única. La exposición gratuita dentro del faro proporciona una perspectiva fascinante sobre la biodiversidad y la importancia ecológica de este parque natural, convirtiendo al faro en un punto de encuentro entre el pasado marítimo y la conservación de la naturaleza.
Visitar el Faro de San Vicente de la Barquera no es solo un viaje a través de la historia marítima, sino también una oportunidad para conectar con la naturaleza y entender la importancia de la conservación ambiental en Cantabria. Con vistas impresionantes y una rica historia, este faro es un testimonio de cómo el patrimonio cultural y natural pueden entrelazarse de manera armoniosa, ofreciendo una experiencia turística enriquecedora y educativa.
Alrededor del faro, se encuentra actualmente una pequeña senda dentro del mismo recinto, donde poder descubrir flora y fauna autóctona, así como un pequeño anfiabiario. Y sin duda una de las mejores vistas de la playa del Rosal.
Faro de la Punta del Torco de Afuera – Suances
Ahora te llevo a un lugar único: el faro situado en la punta del Torco, cerca de la playa de los Locos en Suances. Este faro, que ha estado iluminando el camino desde 1863, es una pieza clave en la historia de la navegación de la zona. Fue incluido en el primer plan de alumbrado de 1961, debido a la complejidad de acceder al puerto de la ría de San Martín de la Arena.
Lo mejor de este faro es lo fácil que resulta visitarlo. Justo en la puerta, hay un parking, lo que significa que no tendrás que caminar mucho para disfrutar de su belleza. Y ahí mismo, cerca del faro, encontrarás los restos del fuerte San Martín de la Arena. Desde este punto, prepárate para quedar asombrado con las vistas panorámicas de la playa de la Concha y la playa Marzan de Cuchía, sin olvidarnos de la encantadora Isla de los Conejos.
Es un lugar que no solo te ofrece historia y cultura, sino también paisajes impresionantes, perfectos para capturar en fotografías o simplemente disfrutar del momento.
Faro de Cabo Mayor ó Bellavista – Santander
Permíteme contarte sobre el faro más imponente que se puede visitar en Cantabria: construido en 1839, se erige majestuosamente al norte de la ciudad de Santander. Hoy en día, este histórico edificio alberga el Centro de Arte Cabo Mayor, un espacio cultural fascinante con cuatro salas de exposiciones repartidas en dos niveles.
Lo interesante de este faro es que su acceso está regulado, lo que le da un toque de exclusividad. Y eso no es todo. Alrededor del faro, se despliega una encantadora ruta costera que te llevará hasta la playa del Sardinero. Imagina caminar por allí, pasando por el campo municipal de golf y la hermosa playa y parque de Mataleñas. Es un recorrido que combina arte, historia y naturaleza de una manera única. Si vas en Otoño – Invierno, cuidado porque el viento en esa zona suele ser bastante fuerte.
Cada vez que visito este lugar, no puedo evitar sentirme impresionado por la magnífica combinación de cultura y belleza natural que ofrece. Es, sin duda, un sitio que debes experimentar por ti mismo.
Faro de la Cerda – Santander
Permíteme llevarte a un lugar especial de Cantabria: el Faro de Cerda, también conocido como el Faro de la Argolla, situado en la pintoresca península de la Magdalena. Este faro es uno de los más desconocidos y creo que el más pequeño de todos. Enclavado en un escenario donde la naturaleza cobra vida, casi frente al Faro de Mouro, y bastante oculto de la vista de los curiosos.
La península de la Magdalena, con su rica vegetación y vistas panorámicas, hace del Faro de Cerda un destino único. Imagina caminar por los senderos que serpentean cerca del faro, con el mar extendiéndose majestuoso a tu alrededor, y sentirte parte de un cuadro vivo. Cada vez que lo visito, me maravillo de cómo este faro, testigo silencioso de innumerables amaneceres y atardeceres, une el pasado con el presente.
Faro de la isla de Mouro – Santander
El Faro de Mouro en Santander es una verdadera joya insular que cautiva con su inaccesibilidad única. Ubicado en una isla en la boca de la bahía de Santander, este faro es inalcanzable tanto en coche, a pie, como en bicicleta, lo que le otorga un encanto especial.
Es conocido por regalarnos los espectáculos fotográficos más impresionantes durante cada temporal. Con solo hacer una búsqueda en redes sociales, podrás encontrar fotos espectaculares que te dejarán sin aliento, alguna incluso en la cuenta de Instagram de esta web 🙂
El Faro de Mouro comenzó a operar por primera vez en 1980 y, antes de su automatización en 1921, contaba con valientes fareros que se encargaban de su funcionamiento. Su historia está llena de anécdotas y curiosidades. En varias ocasiones, los fareros quedaron incomunicados debido a los intensos temporales que azotaban la zona. Y en un trágico suceso en 1865, uno de los fareros perdió la vida al ser arrastrado por una poderosa ola durante un violento temporal.
El Faro de Mouro en Santander es mucho más que una construcción solitaria en una isla. Es un testigo viviente de la incansable lucha entre el hombre y el mar, un faro que desafía las adversidades y se convierte en un faro guía para los navegantes en medio de la tormenta.
Aunque no se pueda acceder físicamente a él, puedes maravillarte con la belleza y la fuerza que emana este faro desde la peninsula de la magdalena o la playa del sardinero. ¡Déjate inspirar por la grandeza del Faro de Mouro y adéntrate en su historia llena de valentía, pasión y resiliencia en medio de los elementos más desafiantes de la naturaleza!
Faro del Pescador – Santoña
¡Sumérgete en la emocionante historia marítima de Cantabria y descubre la joya oculta del Faro del Pescador en Santoña! Aunque a menudo queda en la sombra de su hermano menor, el famoso Faro del Caballo, este faro sigue brillando con fuerza y desempeñando un papel fundamental en la navegación de la costa cantábrica.
Ubicado estratégicamente en un lugar privilegiado, el Faro del Pescador rinde homenaje a la tradición pesquera y la navegación en esta hermosa región. ¡Es una joya imperdible para los amantes del mar y la historia! Además, su proximidad al Faro del Caballo añade aún más encanto a la experiencia.
Si eres un aventurero de corazón, no puedes perderte la épica Ruta del Faro del Caballo. Esta ruta, que toma su nombre del famoso faro, te llevará a través de un paisaje de ensueño, donde el rugir del mar y la brisa marina te acompañarán en cada paso. Imagina caminar por senderos escarpados, descubrir acantilados imponentes, explorar calas escondidas y contemplar paisajes marinos impresionantes. ¡Es una experiencia inolvidable que combina la historia, la naturaleza y la aventura en perfecta armonía!
La Ruta del Faro del Caballo culmina precisamente en el Faro del Pescador en Santoña, brindándote la oportunidad de admirar su encanto único y celebrar tu logro. Desde aquí, podrás disfrutar de vistas panorámicas y sentir la magia de estar en un lugar donde la tradición marítima cobra vida.
¡No pierdas la oportunidad de explorar la fascinante costa de Cantabria y maravillarte con la grandeza de estos faros emblemáticos! Ven y descubre el Faro del Pescador en Santoña y la espectacular Ruta del Faro del Caballo. ¡Prepárate para una aventura que te dejará sin aliento y te hará conectar con la esencia marítima de esta encantadora región!
Faro del Caballo – Santoña
Si estás buscando una aventura única en Santoña, no puedes perderte el Faro del Caballo. Este faro no es el típico destino turístico; es una verdadera joya escondida. Para llegar allí, te enfrentarás a la ruta que toma su nombre, la ruta del Faro del Caballo, un camino que es toda una experiencia en sí mismo. Prepárate para un descenso con más de 700 escaleras que desafiarán tu resistencia, pero te aseguro que vale totalmente la pena.
Una vez llegues al faro, que en si mismo no tiene ninguna particularidad, dado su estado de abandono, encontraras aguas turquesas, gaviotas, y una zona para poder tirarse al mar, que si acudes un día de verano, seguro agradecerás.
Puedes descubrirlo todo sobre la ruta y el faro en este post dedicado 🙂
Lo interesante de esta zona es que no solo tienes el Faro del Caballo, sino que también está bastante cerca del Faro del Pescador, en concreto casi al final de la ruta. Es como un dos por uno en maravillas costeras. Ambos faros ofrecen vistas espectaculares del mar y son perfectos para aquellos que aman explorar lugares menos transitados.
En resumen, si te gustan los desafíos y descubrir tesoros escondidos, la visita al Faro del Caballo es imprescindible. Es una combinación perfecta de aventura, ejercicio y vistas increíbles.
IMPORTANTE: La bajada y posterior subida es un desafío y en diversas ocasiones han tenido que intervenir los servicios de rescate.
Faro del castillo de Santa Ana – Castro Urdiales
El Faro del Castillo de Santa Ana, en Castro Urdiales, es una parada obligatoria por su peculiar ubicación y rica historia. Este faro no es solo un punto de referencia marítimo; está situado sobre el torreón sureste del Castillo de Santa Ana, fusionando así historia militar y marítima en un solo lugar. Esta característica única lo distingue de cualquier otro faro que puedas encontrar.
Además, lo que añade más interés a su historia es que durante muchos años, el faro tuvo una vivienda anexa para el farero. Sin embargo, esta vivienda fue demolida durante la restauración del recinto, dejando el faro tal como lo vemos hoy. Encendido por primera vez el 19 de noviembre de 1853, durante el reinado de Isabel II, el faro ha sido testigo de numerosos eventos históricos y cambios a lo largo de los años.
El Faro del Castillo de Santa Ana no solo te ofrece vistas impresionantes del mar, sino también un viaje a través del tiempo. Su proximidad a la Iglesia de la Asunción, una joya gótica de Cantabria, hace que la visita sea aún más especial. Caminar por este lugar es sumergirse en un capítulo fascinante de la historia española, donde cada piedra y cada vista tienen una historia que contar.